Comprar un coche suele ser un momento clave en la vida económica de una persona. Para poder transportarnos en un nuevo automóvil tendremos que pagar el importe equivalente a entre 1 a 3 años de nuestro salario.
Este inmenso desembolso se puede hacer de varias maneras, siendo las más comunes el crédito y el pago al contado. Si hemos estado ahorrando, podremos pagar el coche en cuestión de minutos y registrarlo bajo nuestro nombre el mismo día de la compra.
En cambio, si necesitamos ayuda de una institución financiera para pagar poco a poco, tendremos que acordar unas condiciones y establecer cuotas mensuales.
Los concesionarios de automóviles se han dado cuenta de que hay mucho dinero en los préstamos e intereses, por lo tanto han empezado a ofrecer financiación a sus clientes en el mismo momento de la compra.
Ahora bien, una vez que un concesionario te ofrece un préstamo, ¿deberías cogerlo? En este artículo te explicaremos si es buena idea seguir adelante o si deberíamos buscar financiación en una entidad bancaria externa.
¡Empecemos!
¿Por qué ofrecen préstamos los concesionarios?
Si un concesionario se dedica a vender coches, ¿cómo es posible que vayan por ahí ofreciendo créditos? La respuesta está en las comisiones.
Cada concesionario está afiliado a una entidad financiera, la cual le dará comisiones cada vez que redirija a sus compradores a contratar un préstamo. Esto es increíblemente beneficioso para los concesionarios, ya que cobrarán el precio del coche más la comisión de la entidad financiera.
De hecho, esta técnica es tan rentable que incluso te ofrecerán un descuento sobre el vehículo para que contrates un préstamo con ellos. Las rebajas suelen ir desde los 1.000€ hasta los 5.000€, y todo para que no acudas a una entidad de financiación externa.
Al final del día, un concesionario te estará ofreciendo un préstamo y un coche, todo en uno, sin tener que realizar muchos más trámites con otras entidades. Además, te ofrecerá un descuento sobre el precio original del vehículo.
Aunque la oferta parezca perfecta, ¿es buena idea contratar el préstamo con un concesionario? Lo descubriremos en el siguiente apartado.
¿Deberías financiar tu coche en un concesionario?
Acabamos de ver todos los puntos positivos de un préstamo otorgado por un concesionario, así que ahora es momento de ver los puntos negativos.
Antes de nada, tienes que saber que un concesionario es un lugar que no está preparado para ofrecer educación financiera. Es un entorno poco profesional (legalmente hablando) en el cual podrías firmar un préstamo sin la asistencia o el entendimiento jurídico necesario para hacerlo.
Esto ha dado lugar a muchas denuncias por falta de transparencia, ya que muchos concesionarios han firmado préstamos sin informar de todas las condiciones que el cliente debería saber.
Aparte de la falta de transparencia, el descuento sobre el precio del coche que te ofrecen por contratar el préstamo tiene truco: Un TIN (tipo de interés nominal) bastante alto.
Mientras que las entidades financieras suelen ofrecer un TIN del 5%, los concesionarios sitúan sus números en torno al 8% TIN (llegando al 10% en algunos casos). Por lo tanto, el descuento sobre el coche puede actuar como una cortina de humo, dando la apariencia de que estamos ahorrando.
Condiciones que benefician al concesionario
Ya que el concesionario no te va a realizar un estudio crediticio tan extenso como lo haría una entidad financiera de primer nivel, suele incluir cláusulas que lo protejan en caso de que las cosas no salgan como estaban previstas.
Una de estas cláusulas es la reserva de dominio, la cual indica que el coche es propiedad del concesionario hasta que se haya pagado la última cuota. No podrás vender el vehículo ni registrarte como titular hasta que hayas pagado cada céntimo del préstamo.
Muchos concesionarios también te obligarán a permanecer en el préstamo pagando intereses al menos dos años. Si pagas las cuotas antes de lo previsto, algunos te quitarán el descuento que te habían aplicado en un primer momento.
También te encontrarás con comisiones ocultas y comisiones de apertura, las cuales suelen rondar el 2%. Todo esto hace que merezca la pena buscar financiación externa antes de firmar nada, y comparar entre diferentes entidades para descubrir cuál te puede ofrecer mejores condiciones.
Reclamar el préstamo de un concesionario
Como explicamos anteriormente, algunos concesionarios pecan de falta de transparencia o incluso de intereses abusivos cuando ofrecen préstamos a sus clientes.
Si te has visto en alguna de estas situaciones, podrás contactar con nuestro despacho, Reclama Por Mí. Nuestros abogados (con más de 3.000 casos ganados hasta la fecha) estudiarán tu caso y te ayudarán a reclamar todo el dinero que hayas pagado de más.
