Compatibilidad entre Ley de la Segunda Oportunidad y herencia
Como anticipo, te diremos que puedes estar tranquilo/a porque hay maneras de combinar Ley de segunda oportunidad y herencia.
La Ley de la Segunda Oportunidad (LSO de aquí en adelante) es una ley creada en 2015 que ofrece una solución legal a las personas que se encuentran en insolvencia económica, brindándoles la oportunidad de empezar de nuevo y liberarse de sus deudas.
La LSO establece un marco jurídico que permite a los deudores negociar acuerdos de pago con sus acreedores o incluso solicitar la exoneración de sus deudas cuando no tienen los recursos suficientes para hacer frente a ellas.
Sin embargo, mucha gente no sabe qué hacer cuando recibe una herencia mientras se está aplicando la LSO.
Para resolver cualquier duda, en este artículo explicaremos las posibles situaciones que te puedes encontrar en este campo y las soluciones que podrías aplicar en cada una de ellas.
¡Empecemos!
Herencia en Acuerdo Extrajudicial de Pagos
El primer caso se trata de una solución sin llegar a juicio, en el cual el deudor se compromete a un acuerdo de pagos con los acreedores para devolver todo o parte de lo debido.
Si el deudor consigue llegar a este acuerdo extrajudicial de pagos con los acreedores y recibe una herencia posteriormente, esta herencia no afectará al acuerdo, a menos que se haya especificado lo contrario en dicho acuerdo.
En otras palabras, si recibimos una herencia después de firmar un acuerdo extrajudicial de pagos, podremos disfrutar de los bienes sin tener que presentarlos ante los acreedores. No tendremos que renunciar a la herencia para poder continuar acogidos a la Ley de la Segunda Oportunidad.
Pero si en el proceso de la Ley de la Segunda Oportunidad se le ha concedido al deudor el BEPI (Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho), entonces la herencia puede tener grandes repercusiones en el plan de pagos.
Herencia una vez aplicado el BEPI
Cuando una persona se acoge a la Ley de la Segunda Oportunidad y se le concede el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI), se le ofrece la oportunidad de librarse de las deudas que no puede pagar debido a su situación de insolvencia económica.
En este caso, la herencia recibida por el deudor después de obtener el BEPI no está exenta de las posibles reclamaciones por parte de los acreedores.
Aunque se haya obtenido el beneficio de la exoneración de deudas, los acreedores aún podrían solicitar que parte o la totalidad de la herencia sea utilizada para saldar las deudas anteriores.
Esto se debe a que la cancelación de deudas del BEPI no incluye las reclamaciones sobre bienes y derechos adquiridos después de su concesión, si no que se aplica únicamente a las deudas existentes en el momento de su ejecución.
Ahora bien, ¿cómo afecta la cuantía de la herencia a este proceso?
Cómo afecta la cuantía de la herencia a la ley de la segunda oportunidad
La cuantía de la herencia puede tener un impacto significativo en la aplicación de la Ley de la Segunda Oportunidad.
En primer lugar, si la herencia recibida es suficiente para cubrir todas las deudas pendientes del deudor, se considerará que el deudor ha obtenido los recursos necesarios para saldar sus obligaciones.
En este caso, se espera que el deudor informe a los acreedores sobre la herencia y proceda a pagar las deudas con los fondos heredados. Como consecuencia, se dará por finalizado el proceso de la LSO, ya que el deudor ha obtenido los recursos para cumplir con sus obligaciones.
Por otro lado, si la cuantía de la herencia no es suficiente para cubrir todas las deudas, se plantea una situación más compleja. En este escenario, es necesario determinar cómo se distribuirán los fondos heredados entre los acreedores.
La LSO establece que los acreedores deben ser tratados de manera equitativa, es decir, recibir una parte proporcional de la herencia en relación con el monto de sus deudas. Sin embargo, es importante destacar que la LSO también busca proteger al deudor y permitirle comenzar de nuevo, por lo que puede existir cierta flexibilidad en la distribución de los fondos.
En este contexto, el deudor puede negociar con los acreedores para establecer acuerdos de pago que reflejen la realidad de la herencia y las posibilidades económicas del deudor. Es posible que se acuerden pagos parciales o plazos de pago diferidos, siempre y cuando se considere que estos acuerdos son viables y justos para todas las partes involucradas.
Hay que destacar que la cuantía de la herencia no invalida la aplicación de la LSO. La ley sigue vigente y su objetivo de brindar una segunda oportunidad a los deudores se mantiene.
Resumiendo, si el deudor recibe una herencia después de obtener el BEPI, deberá notificar a los acreedores sobre la existencia de dicha herencia y su cuantía. Los acreedores podrían solicitar que se les abone la parte proporcional de la herencia que corresponda a sus deudas pendientes.
Es importante tener en cuenta que esta reclamación sólo se aplicará a las deudas anteriores al BEPI, y no a las deudas posteriores.
Qué hacer si me piden la herencia para saldar deudas
En caso de no llegar a un acuerdo con los acreedores, es importante buscar asesoramiento legal para explorar otras alternativas.
Dependiendo de la situación específica, se podría considerar la posibilidad de interponer una demanda de impugnación de la herencia o incluso solicitar la apertura de un concurso de acreedores.
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