La palabra “condonar” proviene del latín “condonare”, que significa “donar” o “perdonar”. Originalmente, esta palabra se utilizaba en el contexto de perdonar penas, incluyendo la pena de muerte, y renunciar a derechos o deudas en favor de otra persona.
Hoy en día, hemos tomado esa palabra prestada del latín para reflejar el perdón de una deuda de manera parcial o total. Aunque parezca una herramienta que no debería ser muy usada, la realidad es que en algunas situaciones su aplicación es muy común.
Especialmente en los últimos años, en el contexto de la crisis económica y la pandemia de COVID-19, el número de solicitudes de condonación de deuda ha aumentado significativamente en 2020 y 2021, reflejando la presión económica sobre muchos sectores.
Para entender todo esto de manera más detallada, en este artículo exploraremos qué es la condonación de deuda, cómo se realiza en España y algunos aspectos relevantes que deben tenerse en cuenta.
¡Empecemos!
Qué es la condonación de una deuda
La condonación de una deuda es el acto mediante el cual un acreedor decide perdonar, total o parcialmente, la obligación que tiene un deudor de pagar una deuda.
Esto significa que el acreedor renuncia a su derecho de exigir el pago de la deuda, liberando al deudor de su obligación financiera. La condonación de deuda puede darse por diversas razones, tales como dificultades financieras del deudor, acuerdos entre las partes, o decisiones políticas o económicas.
Especialmente podemos ver esta situación en el contexto de fondos buitre que compran deuda de baja calidad. Las posibilidades de repago de este tipo de deudas son bajas, así que los fondos buitre negocian una condonación parcial para cobrar al menos una parte del total.
Aunque la condonación parcial es una de las versiones más comunes de esta herramienta legal, también existen otras:
- Condonación Total: Se perdona la totalidad de la deuda, liberando al deudor de cualquier obligación de pago.
- Condonación Condicional: Se otorga la condonación bajo ciertas condiciones que el deudor debe cumplir.
- Condonación Incondicional: Se concede sin condiciones adicionales.
Ahora bien, si quieres perdonar una deuda (o que te la condonen) hay que seguir un procedimiento específico, el cual vamos a explicar en el siguiente apartado.
Cómo solicitar la condonación de una deuda
La condonación de una deuda se puede realizar mediante pacto entre las partes. Si la persona “A” y la persona “B” están de acuerdo en la condonación de manera expresa, no se necesita nada más.
Aun así, para asegurarnos de que esta condonación perdura en el tiempo, lo mejor es realizarlo ante notario. Esta medida extra nos otorgaría las siguientes ventajas:
- Mayor seguridad jurídica: El acto queda documentado de forma oficial y fehaciente, lo que dificulta su impugnación.
- Asistencia profesional: El notario puede asesorar a las partes sobre las implicaciones legales de la condonación y garantizar que se cumplan todos los requisitos formales.
- Ejecución judicial: En caso de incumplimiento, el documento notarial puede servir como base para ejecutar la condonación en vía judicial.
Por supuesto, el notario se suele usar en situaciones donde la cantidad de la deuda es lo suficientemente grande, especialmente para justificar los costes que conlleva este proceso y el tiempo que conlleva la burocracia. Si la deuda es pequeña, un documento firmado entre las partes puede satisfacer al deudor y acreedor.
Como hemos podido comprobar, la condonación de la deuda es un procedimiento extremadamente sencillo en el cual se extingue una parte o totalidad de la deuda por voluntad de las partes.
Si bien no requiere de formalidades para ser efectiva, realizarla ante un notario siempre nos dará más rigor jurídico y protección legal por si algo pudiera ocurrir en el futuro.
Pero seamos realistas, estas condonaciones no suelen ser lo más habitual. Generalmente el acreedor no deja de insisitir para recibir la totalidad de la deuda, o gran parte al menos. Para estos casos en los que no hay acuerdo existe la Ley de la segunda oportunidad. Esta permite al deudor reestructurar y hasta cancelar sus deudas si cumple los requisitos para ello.