Las tarjetas de crédito revolving se han hecho especialmente famosas estos últimos años por su frecuencia en los tribunales y juzgados.
Decenas de compañías han ofrecido este producto financiero sin demostrar transparencia en sus tarifas y cobrando intereses abusivos, lo que lo ha generado cientos de denuncias para su cancelación.
Pero antes de denunciar a tu banco por una tarjeta revolving hay algunos detalles que hay que tener en cuenta. Y es que esta acción legal puede acarrear consecuencias para tu situación financiera en general, especialmente si tienes una hipoteca, una cuenta corriente u otros productos contratados con el mismo banco.
Por ello, en este artículo explicaremos los riesgos de denunciar a nuestro banco si tenemos contratados múltiples productos con ellos, y qué hacer para que nuestra relación con la entidad bancaria no se vea mermada por la defensa de nuestros derechos.
¡Empecemos!
Qué ocurre si denuncio al banco por mi tarjeta revolving
Si has determinado que tu tarjeta revolving tiene intereses desmedidos o incluye cláusulas poco transparentes, naturalmente el siguiente paso será denunciar para que nos devuelvan el dinero pagado de más.
El problema es que la misma entidad con la que tienes contratada la tarjeta revolving puede tener otros productos financieros a tu nombre, como una cuenta corriente o una hipoteca.
Por lo tanto, a veces surge el miedo de que el banco utilice fondos de otros productos financieros para cubrir los impagos de tu tarjeta revolving.
Pero, ¿este miedo está justificado o el banco no tiene derecho a embargar nuestras cuentas o incluso nuestra hipoteca?
Cómo funciona el embargo de una cuenta o hipoteca
El embargo de una cuenta supone el bloqueo de los fondos de una persona o entidad. Cuando el banco recibe la orden de embargo, retiene el saldo que tienes en tu cuenta, se queda “congelado”.
Lo más importante que hay que saber es que el banco no puede embargar una cuenta de manera unilateral. El embargo tiene que ser siempre instruido por un juez o una administración, nunca lo podrá hacer una empresa o un particular.
Por lo tanto, si una entidad bancaria quiere embargar otras cuentas a tu nombre, tendrá que seguir el siguiente proceso:
- Comunicación del embargo: Cuando recibe la orden, tu banco te tiene que comunicar el embargo para que tengas tiempo suficiente para ejercer tus derechos y oponerte al embargo.
- Transferencia del dinero al juzgado. Si no te has opuesto al embargo en el plazo indicado, el banco transfiere el dinero de tu cuenta a la cuenta del organismo que ha ordenado el embargo. En ese momento, dejarás de ver el dinero en tu cuenta.
Como podemos observar, una entidad bancaria no puede embargar cuentas o hipotecas sin la autorización expresa de un juez. Por lo tanto, podemos denunciar a nuestro banco sin miedo de que nos bloqueen otras cuentas de manera inmediata.
Ahora bien, ¿cómo podemos evitar que el banco consiga embargarnos las cuentas por impagos a largo plazo?
Cómo evitar embargos en cuentas e hipotecas
Para evitar embargos en productos financieros que tenemos contratados, lo primero será comunicar al banco nuestra reclamación por la tarjeta revolving. Si todavía no hemos cumplido este paso, tendremos que seguir pagando.
Pero una vez que la reclamación haya sido interpuesta, podremos dejar de pagar las cuotas. Al menos hasta que la denuncia haya sido resuelta por el banco o, en el peor de los casos, por un juzgado.
Si tu situación financiera es favorable, recomendamos seguir pagando las cuotas hasta que esté todo solucionado.
Esto se debe a que las entidades bancarias pueden incurrir en técnicas molestas para presionarte y obligarte a pagar, así que es mejor esperar a que el juez resuelva tu caso para dejar de pagar las cuotas de tu tarjeta revolving.
Riesgos de denunciar al banco por tu tarjeta revolving
Como hemos explicado anteriormente, si tu tarjeta revolving tiene intereses abusivos y no tiene transparencia en sus cláusulas, lo mejor será poner una reclamación al banco o denunciarlo.
Mientras hacemos esto es conveniente tener la mejor relación con la entidad bancaria, así que (a ser posible) es recomendable seguir pagando las cuotas de la tarjeta que vamos a reclamar.
Ahora bien, aunque nuestra entidad bancaria no podrá embargarnos nuestras cuentas o productos financieros sin colaboración judicial en ningún momento, es importante tener en cuenta los siguientes factores de riesgo:
Represalias por parte del banco: Al denunciar al banco, podrías enfrentar una relación más tensa con la entidad financiera. Esto podría manifestarse en términos de servicio deficiente, tasas de interés menos favorables en otros productos financieros o incluso el cierre de cuentas.
Daño a tu historial crediticio: En algunos casos, denunciar a una entidad financiera podría conducir a conflictos que afecten negativamente tu historial crediticio, lo que podría dificultar la obtención de créditos en el futuro.
Pérdida de otros beneficios: Los bancos suelen ofrecer ventajas o descuentos a clientes que tienen varios productos contratados con ellos. Al denunciar o litigar contra el banco, podrías perder ciertos beneficios asociados a tu relación con la entidad.
Si bien denunciar a nuestro banco conlleva un riesgo relativo, recomendamos mantener la mejor relación posible con este.
El sistema judicial puede ser muy lento en algunos casos, así que aconsejamos tener una buena vía de comunicación con la entidad bancaria y hacer la denuncia en buenos términos.
Te ayudamos con tu reclamación
Abogados expertos en reclamaciones de Microcréditos y Tarjetas Revolving.
Rellena el formulario y evaluamos tu caso gratis.
Autor del artículo
Javier Moyano
- Director de operaciones de Reclama por Mí
- Grado en administración de empresas
- 7 años de experiencia en reclamaciones financieras