Nuestra clienta (Con las siglas ACF) de Valencia llevaba más de 14 años pagando las cuotas de una tarjeta Wizink. Pero por más cuotas que pagaba, la deuda no terminaba nunca. Aún debía casi 1.000€ a la entidad.
Recurrió a nosotros a finales del 2022 y en septiembre de este año tuvimos la resolución favorable.
La sentencia reconoce que la entidad aplicó cláusulas abusivas en el contrato y falta de transparencia. Por eso, conceló la validez del contrato y, no solo la clienta ya no debe dinero a la entidad, sino que Wizink debe tuvo que devolver casi 19.000 euros que ella había estado abonando durante estos años de forma injusta.